Este sábado 4 de enero, en el predio de la ex ESMA, se realiza un festival en apoyo a los trabajadores de la Secretaría de DDHH y del Centro Cultural Haroldo Conti quienes enfrentan miles de despidos y el vaciamiento de los Sitios de la memoria en un intento del gobierno negacionista de Milei y Villarruel de atacar la histórica lucha por los DDHH.
Sin trabajadores no hay memoria. Desde las 6 de la tarde comenzaron a llegar miembros de asambleas barriales, trabajadores de otros sectores, organizaciones de DDHH, sociales y políticas, representantes de Centros de estudiantes, legisladores y diputados. Defender los puestos de trabajo de los miles de trabajadores y esos espacios es mantener la lucha por los 30000.
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El Gobierno busca avanzar en un desmantelamiento de lugares esenciales para la preservación de la memoria colectiva, atacando a sus trabajadores y yendo más allá, anunciando cierres de espacios enteros cómo es el Centro Cultural Haroldo Conti o dejando sin trabajadores al Espacio para la Memoria “Virrey Cevallos”. Son ataques que se suman al cierre casi total de los CAJ (Centros de Acceso a la Justicia) que funcionaban en todo el país.
Desde el jueves 26 habían comenzado a llegar los telegramas de despido confirmando así las amenazas lanzadas por directivos de la cartera que conduce Cuneo Libarona. El viernes 27, las y los trabajadores de la Secretaría rápidamente se pusieron de pie y realizaron un abrazo al mismo predio que contó con un amplio arco de organizaciones que acudieron al grito de guerra. Con el comienzo del año llegó la noticia de las intenciones del Gobierno de cerrar el Conti mediante el vaciamiento del reconocido espacio.