En medio de la crisis del Hospital Garrahan y el paro de los residentes, las autoridades del hospital pediátrico anunciaron este domingo un aumento salarial para los profesionales de la salud. Apuntaron que el incremento ya estaba planeado y criticaron la medida de fuerza que tuvo impacto a nivel nacional. De esta manera, el sueldo de los médicos residentes se elevarán alrededor de $ 1.300.000 desde el 1 de julio.
“Este incremento es resultado de la planificación presupuestaria dispuesta para esta etapa del año, no de las medidas de fuerza guionadas por la militancia kirchnerista que se esconde detrás de los médicos”, apuntaron desde la administración del Garrahan a través de un comunicado oficial. Se trata de un aumento que incrementó los $ 797.000 que cobraba los trabajadores de ese sector, que equivale a un 64%”.
Los residentes llevaron a cabo una medida de fuerza durante una semana que tuvo fuerza acompañamiento de todos los sectores sociales y políticos a nivel nacional que reveló el desguace del gobierno nacional al hospital pediátrico más importante del país. En tanto, desde la administración volvieron a atacar la protesta social y reivindicaron despidos y ajuste: “Gracias al ahorro estimado como resultado de la reducción de personal fantasma y la eliminación de desvíos presupuestarios, se otorgará a los residentes del Hospital un aumento que elevará sus ingresos en torno a $1.300.000 a partir del 1° de julio».
Hasta el presente mes, los médicos residentes percibían un salario de $797.000 en mano. Fuentes gubernamentales explicaron que, sobre ese monto, el Garrahan ya transfería unos $200.000 adicionales. Sin embargo, se decidió incrementar esa cifra a $500.000, lo que representa un aumento nominal de $300.000. Este incremento total del 30% tiene como objetivo principal poner fin a las asambleas de los empleados del hospital, en particular las de los médicos residentes, que estaban previstas para mañana y el resto de la semana.
El comunicado emitido por el directorio del nosocomio, cuya redacción fue «revisada minuciosamente por la Casa Rosada», advirtió que continuará el proceso de auditoría interna en el Garrahan. «Estamos erradicando los desvíos presupuestarios y gastos superfluos», afirmaron desde el texto, en línea con la política de ajuste y control del gasto público impulsada por el Gobierno.