Tal como ocurrió en la edición del año pasado, el presidente Javier Milei volvió a decir presente en la inauguración oficial de la Exposición Rural de Palermo, el evento más emblemático del calendario agropecuario argentino. La ceremonia, que marca tradicionalmente la relación entre el campo y el gobierno de turno, tuvo este sábado su acto principal con el discurso del presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino, quien encabeza por cuarto año consecutivo la entidad que representa a los sectores más concentrados del agro nacional. En un contexto de expectativas renovadas por el giro promercado que representa la administración libertaria, el dirigente ruralista intentó hacer equilibrio entre el respaldo político y las demandas sectoriales. Sin embargo, fue un blooper involuntario lo que terminó llevándose todas las miradas —y viralizándose en redes—, cuando Pino cometió un desliz verbal justo al dirigirse a Milei.
El acto, que se llevó a cabo en el tradicional predio de la SRA en Palermo y contó con una fuerte presencia de dirigentes rurales, empresarios, funcionarios nacionales, gobernadores del interior productivo y medios de todo el país, fue transmitido en vivo por distintos canales y portales. Luego de los discursos protocolares, llegó el turno de Nicolás Pino, quien intentó reflejar el entusiasmo moderado que atraviesa al sector agropecuario frente a la política económica del gobierno libertario. «El camino está marcado. No dudamos que el gobierno eliminará las retenciones más tarde que temprano…», comenzó diciendo, hasta que tropezó con sus propias palabras. «EEE… digo, más temprano que tarde. Cosas que pasan, Cacho», se corrigió entre risas, aludiendo a un supuesto interlocutor invisible y generando carcajadas incluso en el presidente Javier Milei, que se encontraba a pocos metros del atril.
La escena, breve pero elocuente, se convirtió de inmediato en material viral en plataformas como X (ex Twitter), Instagram y TikTok, donde se multiplicaron los comentarios que iban desde el humor hasta la crítica, pasando por interpretaciones políticas del fallido. Algunos usuarios interpretaron el error como una muestra del escepticismo que persiste entre los productores frente a la promesa de eliminación de las retenciones —uno de los reclamos históricos del sector agropecuario—, mientras otros celebraron la espontaneidad del momento como un símbolo de distensión entre el gobierno y el campo, en contraste con los enfrentamientos que marcaron etapas anteriores, como el conflicto de 2008 por la resolución 125 o los últimos años de tensión con el kirchnerismo.
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