Si bien muchos de los últimos y mejores celulares brindan cuatro o más años de soporte de software, este es un desarrollo más reciente en el espacio de Android. Si no actualizaste en los últimos tres o cuatro años, es probable que se esté acercando al final de los pocos años de soporte que prometió su fabricante, incluso si planeás conservar tu celular durante unos años más.
Aquellos celulares con hardware más de gama media son aún más propensos a haber dejado de recibir actualizaciones, aunque la situación también mejora aquí. Sin embargo, los celulares Google Pixel y los más recientes Samsung Galaxy S, que cuentan con siete años de soporte de software, llegará al final de su vida útil, aunque en el año 2031. Entonces, ¿deberías preocuparte cuando tu celular ya no es compatible?
Actualizaciones del sistema operativo frente a actualizaciones de seguridad: ¿cuál es la diferencia?
Lo primero que debés tener en cuenta es si tu celular llegó al final de su ciclo de vida de actualización del sistema operativo, que generalmente es lo primero, o si su fabricante también dejó de proporcionar actualizaciones de seguridad. Cada uno de estos escenarios tiene diferentes implicaciones para tu celular.
¿Qué sucede si dejó de recibir actualizaciones del sistema operativo?
El sistema operativo (SO) Android o las actualizaciones del sistema incluyen nuevas funciones y la última versión de Android. Algunos ejemplos son la actualización de Android 15 y las variantes del fabricante, como OneUI 7 de Samsung.
Esta clase de actualizaciones mantiene tu celular fresco con el aspecto, las funciones y las actualizaciones de seguridad más recientes, pero no es un problema inmediato una vez que tu celular deja de recibirlas.
Para empezar, no perderá funcionalidad solo porque no esté en la última versión de Android. Las piezas clave de software (por ejemplo, Google Pay y Play Store) y las aplicaciones de terceros siguen funcionando incluso cuando las versiones más recientes de Android se implementan en los dispositivos más nuevos.
Las aplicaciones más antiguas también seguirán funcionando durante algún tiempo. Después de todo, los desarrolladores tienen la costumbre de dirigirse a la base más amplia en lugar de a los que están a la vanguardia, y Android sigue admitiendo la compatibilidad con versiones anteriores siempre que puede.
En pocas palabras, perderse las actualizaciones del sistema operativo significa que es posible que no tengas acceso a algunas funciones nuevas que encontrará en celulares más recientes con la última versión de Android. Sin embargo, aún podrás acceder a la mayoría, si no a todas, las aplicaciones de terceros y las funciones principales de Android que hacen que la plataforma sea tan excelente.
Dicho esto, Android evoluciona con cada año, introduciendo nuevas herramientas de desarrollo y depreciando las antiguas, y los desarrolladores de aplicaciones no pueden admitir todas las versiones de Android para siempre. Este suele ser un problema mayor para los desarrolladores de aplicaciones más pequeños que no tienen los recursos de los principales editores.
Eventualmente, es posible que descubras que no podés instalar algunas aplicaciones si estás ejecutando una versión antigua de Android (pensá en más de cinco años). Pero esto es bastante raro, y muchas aplicaciones siguen siendo compatibles con una amplia gama de versiones de Android.
¿Qué sucede si dejó de recibir actualizaciones de seguridad?
Si bien jugar con las últimas funciones es bueno, las actualizaciones de seguridad son más importantes desde la perspectiva de mantener tu celular funcionando felizmente durante el mayor tiempo posible. Nadie quiere encontrarse con un «exploit» (un fragmento de software, fragmento de datos o secuencia de comandos o acciones, utilizada con el fin de aprovechar una vulnerabilidad de seguridad de un sistema para conseguir un comportamiento no deseado) que rompa el celular o la seguridad.
Google aplica parches de seguridad mensuales al Proyecto de Código Abierto de Android, que los fabricantes recogen y despliegan en los celulares de manera oportuna… con suerte.
En términos generales, tu celular puede recibir actualizaciones de seguridad semi regulares durante uno o dos años después de que deje de recibir actualizaciones del sistema operativo. Pero esto es menos común con los celulares de gama media y económicos, así que consultá la política del fabricante.
Desafortunadamente, no fue hace mucho tiempo que la mayoría de los celulares Android vieron solo un par de años de parches de seguridad, por lo que es posible que los celulares más antiguos ya estén desactualizados y corran el riesgo de vulnerabilidades de seguridad.
Las actualizaciones de seguridad abordan vulnerabilidades críticas que afectan al sistema operativo Android, las API (sigla en inglés por interfases de aplicaciones de usuarios) y el hardware subyacente en el que se basan las aplicaciones que se ejecutan en el celular.
Estos parches pueden abarcar todo, desde exploits aterradores de ejecución remota de código y vulnerabilidades de memoria de hardware hasta problemas aparentemente menos comunes que podrían ayudar a un ladrón a eludir la pantalla de bloqueo si robó el celular.
Esto no quiere decir que tu celular sucumbirá instantáneamente a todos los peores virus sobre los que leerás en línea sin los últimos parches instalados. Muchos exploits solo funcionan en circunstancias específicas, a menudo requieren la instalación de software malicioso o que un actor malintencionado tenga acceso físico a un celular.
Además, practicar el uso seguro del celular, como instalar solo aplicaciones de fuentes verificadas y no hacer clic en enlaces de correo electrónico sospechosos, agrega otra capa de seguridad que puede compensar la falta de parches.
Aun así, los parches de seguridad garantizan que no se produzcan vulnerabilidades (raras o comunes); Perderlos aumenta tu riesgo exponencialmente con el tiempo. Nunca se sabe cuándo un exploit innovador puede convertirse en un riesgo de seguridad significativo.
Qué hacer si mi celular ya no recibe actualizaciones
Lo anterior puede sonar preocupante si tu celular pasó su ventana de actualización, pero los parches de seguridad mensuales no son la única forma en que tu teléfono móvil inteligente se mantiene seguro. Google descargó algunos de sus mecanismos de actualización a Google Play System Updates, parte del Proyecto Mainline que se implementó en Android 10.
Esto permite a Google actualizar algunos módulos principales de Android sin depender de los fabricantes de celulares para ofrecer una actualización de «firmware» (programa informático que establece la lógica de más bajo nivel que controla los circuitos electrónicos de un dispositivo de cualquier tipo) tradicional.
Google puede parchear los «códecs» (programa capaz de codificar o decodificar una señal o flujo de datos digitales) de medios, los componentes de Media Framework, el controlador de permisos, la configuración de permisos de red, y varios otros componentes de forma rápida y sencilla a través de Play Store. Por supuesto, los dispositivos Android que no utilizan los servicios de Google no se benefician.
Se ofrece un nivel de protección mucho mejor para los dispositivos antiguos y nuevos que en años anteriores, siempre que esté ejecutando al menos Android 10. Aun así, las actualizaciones de seguridad mensuales son esenciales para parchear partes que el actualizador de Google no puede tocar.
Mantenemos una cantidad cada vez mayor de información confidencial en nuestros celulares, desde aplicaciones bancarias hasta identificaciones digitales, por lo que mantener su dispositivo seguro nunca ha sido más importante.
Con eso en mente, llegar al final de las actualizaciones de seguridad prometidas es un buen indicador de que es hora de buscar un nuevo teléfono móvil inteligente. No tiene por qué ser de inmediato, pero estarías tentando al destino al mantener información confidencial en un celular con medidas de seguridad que están desactualizadas desde hace un año o más.
Cuando llegue el momento de actualizar, buscá una marca que ofrezca soporte a largo plazo que mantenga tu nuevo celular funcionando de manera segura durante el mayor tiempo posible. El Pixel 9 de Google y la serie Galaxy S de Samsung lideran el camino con siete años de soporte de seguridad y sistema operativo, y sus celulares asequibles se benefician de políticas similares. Cuatro o cinco años es un poco más estándar fuera de esos dos grandes fabricantes de celulares.